Confirmó el Señor Obispo Don Juan Navarro Castellanos sobre el comunicado que se estableció para cada Diócesis, mismo que la conferencia del episcopado mexicano les envió mediante un comunicado para que cada iglesia, templo o capilla se sume a la emergencia sanitaria “convencidos de la importancia de la prevención y de solidarizarnos con nuestra gente y con la sociedad en general” afirmó el jerarca católico.
A partir de este lunes se llevarían a cabo confesiones comunitarias organizadas por los decanatos, sin embargo, igual que se suspendió la celebración del día de la Diócesis, que habían programado para el 26 de abril e igualmente la peregrinación a la Basílica de Guadalupe será superada si en un mes no se supera la emergencia.
Notificaron que “Serán suspendidos los encuentros para grupos numerosos, como retiros, asambleas, congresos, jornadas y catequesis, las celebraciones Eucarísticas dominicales en los templos parroquiales, santuarios y capellanías. Cada obispo, en su jurisdicción, podrá dispensar de la obligatoriedad de la Misa dominical. Los sacerdotes, sin embargo, no dejen de celebrar la Misa de una manera privada. Facilitar en la medida de lo posible, que las Eucaristías sean transmitidas por las plataformas digitales y los medios de comunicación públicos y privados, de modo que los fieles puedan unirse espiritualmente a los misterios de la fe”.
Durante los próximos días, con las medidas sanitarias, los templos parroquiales, si cuentan con laicos que puedan controlar la correcta disposición de fieles orantes, pueden permanecer abiertos para la oración personal y comunitaria. Se podría exponer el Santísimo para la oración y adoración.
Es así que “nos ponemos en las manos de la providencia, confiando totalmente en el Señor, vivamos esta experiencia con sentido de Iglesia y también como ciudadanos responsables en el mundo que nos ha tocado vivir” concluyó Monseñor Don Juan, obispo de esta Diócesis de Tuxpan.
