¡Otra vez Oro!
Progreso, Yucatán, julio 11 de 2025.– En las aguas calurosas del sureste mexicano, donde el sol parece cincelar las sombras sobre el oleaje, un grupo de veracruzanos volvió a demostrar que el canotaje no es solo deporte: es arte, es entrega, es identidad.
Hoy, en la Olimpiada Nacional CONADE, Saúl Chávez y Emiliano Guzmán navegaron con precisión y alma en la prueba K2, ganando la medalla de bronce. Una presea que, más allá del metal, lleva grabado el espíritu de lucha de dos jóvenes que se entienden al ritmo del agua, como si sus remos fueran plumas firmando poesía líquida sobre la pista.
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Pero el momento estelar fue reservado para una escuadra que remó con la fuerza de la historia misma: Damián Velázquez, Diego Jacobo, Florentino Serrano y Fernando Montes se alzaron con la medalla de oro en la prueba K4, haciendo retumbar Progreso con su hazaña. Cuatro almas, un solo impulso, y una embarcación que voló sobre el canal con la furia serena del Golfo de México.
Hoy, el canotaje veracruzano se enciende como antorcha olímpica, llevando en sus palistas el orgullo de un estado que respira por sus ríos y se levanta con sus jóvenes.
Desde Tuxpan hasta Coatzacoalcos, de la montaña al litoral, los nombres de estos campeones ya son parte del mural del deporte veracruzano.
¡Que suene el tambor!
¡Que ondee la bandera!
Porque estos muchachos no solo ganaron en el agua…
¡Ganaron un lugar en la historia!
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