Un Taxista, una mujer en la cajuela y un presunto secuestro en Petrópolis
Tuxpan, Veracruz | Un extraño suceso ocurrido durante las primeras horas de esta tarde en la calle Leopoldo Prianti, en la zona de Infonavit Petrópolis, dejó atónitos a vecinos, autoridades y transeúntes. Lo que inicialmente parecía un simple accidente de tránsito se convirtió en una escena digna de una película, con acusaciones de intento de secuestro, una mujer lesionada y hasta una esposa escondida en la cajuela de un taxi.
El incidente involucró a un taxi Nissan Tsuru, número económico 1387, sin placas de circulación, conducido por Adán «V», de 33 años, vecino de la colonia Obrera. Según el relato de una testigo, una mujer acompañada de una señora mayor y una menor le hizo la parada al vehículo. Sin embargo, en cuestión de segundos, la escena se tornó caótica: la mujer terminó en el suelo gritando que el taxista intentaba llevarse a su hija, mientras otro conductor se acercaba a auxiliarla. Para añadir más desconcierto, una mujer salió de la cajuela del taxi, afirmando ser la esposa del conductor.
La versión de los hechos, sin embargo, parece tener una explicación menos cinematográfica. Todo apunta a que el taxi, en pésimas condiciones mecánicas, tuvo un percance cuando la madre intentó subir al vehículo tras la señora mayor y la menor. Al conductor se le «patinó el clutch», lo que provocó que la unidad avanzara inesperadamente y lesionara gravemente el pie de la mujer, identificada como Rosa Lilia «M». Ella quedó tendida en la calle y, aunque Adán intentó ayudarla, la señora rechazó su auxilio.
Pero el detalle más intrigante sigue siendo la mujer en la cajuela. Ella afirmó ser la esposa del taxista y explicó que viajaba ahí porque el vehículo iba «sin cupo» tras una carrera con varios pasajeros. Según Adán, su esposa lo acompaña siempre debido a supuestos problemas de salud, y en esa ocasión, al llenarse el taxi, él preguntó a los pasajeros si les incomodaba que ella viajara en la cajuela. Sin embargo, los testigos aseguran que el taxi estaba vacío cuando la familia le hizo la parada, lo que genera dudas: ¿por qué no sacó a su esposa de la cajuela si ya no había pasajeros? La expresión de sorpresa de Adán al verla salir sugiere que ni él sabía que estaba ahí.
Las especulaciones no se hicieron esperar. ¿Se trata de una esposa celosa, de esas que en Tuxpan llaman «tóxica», intentando pillar a su marido en un desliz? ¿O simplemente fue un arreglo improvisado para aprovechar una carrera? Lo que sí es un hecho es que el taxi estaba en mal estado, como corroboró Tránsito Municipal al intentar moverlo. Adán acompañó a Rosa Lilia en la ambulancia al Hospital IMSS Bienestar «Emilio Alcázar», de donde salió alrededor de las 3:30 de la tarde e incluso le compró los medicamentos a la lesionada.
Al lugar acudieron elementos de Protección Civil, quienes fueron los que trasladaron a la afectada al Hospital para su atención médica, así como personal de Tránsito y Policía Municipal, que investigaron el incidente. Las autoridades aún no han emitido una versión oficial, dejando a los tuxpeños con más preguntas que respuestas.
Querido lector, la decisión es suya: ¿cree que la esposa estaba en la cajuela por necesidad o por celos? En Tuxpan, esta historia ya es el tema del día.
