En medio de las aguas turbulentas de la política local, el Diputado Local Genaro Ibáñez Martínez, quien obtuvo su curul por mayoría relativa en el distrito 3 de MORENA para la LXVI Legislatura en el Congreso de Xalapa, se encuentra sumergido en un panorama desolador de nula aceptación por parte de sus electores.
Nuestra redacción realizó una exhaustiva encuesta en Tuxpan, Veracruz de donde es originario y pues, donde vivimos el pulso del morenismo, en la que se buscó la opinión del público respecto a la posible reelección de Ibáñez Martínez. Los resultados arrojaron una cifra desoladora para el legislador, dejando al descubierto una brecha abismal entre él y la ciudadanía.
El Gran Salón
Un contundente 31% de los votantes manifestó de manera categórica que «NO VOLVERÍA A VOTAR» por el Diputado Genaro. En una asombrosa contrastación, solo un exiguo 4% expresó algún grado de aceptación hacia su gestión, destacando la distancia entre la percepción pública y la realidad que rodea al representante local.
Resulta aún más sorprendente el hecho de que una opción creada por un usuario de la red social, Emilio Aguilar Hernández, se alzara con la victoria en la encuesta con un impresionante 36% de preferencias. La opción agregada, titulada «¿Quién vrgs es Genaro Ibáñez?», se convirtió en la voz de aquellos que parecen desconocer al legislador, desatando un tsunami de burlas y sarcasmo en la población tuxpeña.
Las críticas se centran en la aparente ausencia de Genaro Ibáñez en las labores que prometió desempeñar tras obtener el voto de confianza de sus electores. Residentes de Tuxpan argumentan que el diputado simplemente desapareció de la escena pública, dejando a sus votantes en un estado de desencanto y frustración.
El mensaje contundente que emerge de esta encuesta es claro: en Tuxpan, Genaro Ibáñez no solo carece de respaldo popular, sino que su eventual reelección se vislumbra como una maniobra amañada, alejada de la genuina voluntad ciudadana que en su momento lo catapultó a la posición que ahora ocupa.
En mi opinión, este es un llamado de atención a los políticos que buscan la reelección, se subraya la importancia de conectar con la ciudadanía, de codearse con el pueblo que en su momento les confirió el voto. El caso de Genaro Ibáñez Martínez sirve como advertencia palpable de las consecuencias que puede acarrear el distanciamiento de los representantes populares respecto a sus electores.
La Morsa