Por: Lic. Mormo.

Dado que se aproxima nuevamente el momento de refrendar lo que viene siendo la bonita tradición del “día del niño perdido” mucha gente nos pregunta sobre la historia, su origen y hasta nos sugiere que “deberíamos” hacer un artículo para dárselos a conocer… y como a mí me gusta andar leyendo de todo, investigando y rascando en la historia, por supuesto que me lo tomé muy enserio y en atención a eso nos hicimos las siguientes preguntas.

¿Cómo Empezó todo el show?

Pues viene principalmente del pasaje bíblico del evangelio de Lucas versículos del 2:41 a 2:50, que es el único evangelio que habla de este suceso, y se conoce como “Jesús entre los doctores” o “niño Jesús entre los doctores” – que cabe recalcar que para ese entonces el niño ya no era tan niño, el chamaquito ya tenía 12 años, por lo que se entiende que la pobrecita virgen maría estaba lidiando con la rebeldía de su hijo adolecente, y al niño ya le daba por escaparse 3 días y sin avisar.

El muy inconsciente le daba igual la preocupación de sus padres doña Mary y don P.P. pues le gustaba juntarse con el escuadrón del templo, aunque hoy en día no hay de qué preocuparse porque aquí en los templos no se reúnen a dialogar con copas de alcohol, por lo menos con niños, pero antes, antes creo que sí. Así que nada tonto, eligió juntarse con los más experimentados y sabios adultos, aunque hoy ya existen términos para eso como el Grooming, childgrooming, el sharenting, maltrato infantil, padres ausentes, síndrome del niño vulnerable, entre otros; pero esos son para otra ocasión- cito literalmente el evangelio:

En los evangelios constituye el último de los relatos de la infancia de Jesús. Hasta ese momento, Jesús se había mostrado obediente con sus padres y ejemplar (Lucas 2:51). En la interpretación católica, los tres días de separación de sus padres, en especial de María, se muestran como un signo de lo que será la Redención con el sacrificio del Dios Hijo al Dios Padre y la muerte en la cruz.

Mandarina Café

Es la primera ocasión en la que Jesús muestra lo que será su actividad de predicación: el diálogo con los demás, en vez de la mera transmisión de las normas.

Pero ¿quién trajo esa tradición a Tuxpan? ¿Quién la inició? , ¿Por qué o para qué? Bueno, pues el responsable del origen del rito del día del niño perdido en esta zona, que se arraigó con ahínco en el corazón de tochpan, fue fray Junípero Serra quien en el ejercicio de su apostolado -apostolado significa propagación o divulgación de una causa o doctrina, pa´ los que no sepan- venía como misionero a la Nueva España, cuando México todavía no se llamaba México; y después de casi medio naufragar y una breve escala evangelizadora en Puerto Rico, llegó finalmente al puerto de Veracruz un 7 de Diciembre pero de 1749.

Durante su estadía en Veracruz Norte antes de continuar con su labor misional hacia el proyecto de sierra gorda, un territorio montañoso, que actualmente conocemos como Querétaro y unas partes de San Luis Potosí y Guanajuato; donde ya habían fracasado algunos franciscanos; Serra educó a los amerindios en diversas áreas del saber como la ganadería y la agricultura pues consideraba que estos eran un vínculo entre los hombres y Dios; y también levantó y fundó iglesias, entre ellas la muy vanagloriada iglesia de Temapache dedicada a Santiago Apóstol por ser el Santísimo Patrono de Todas las Españas.

Introdujo como forma de evangelización la representación del rito de la iluminación del camino con velas encendidas para ayudar en la búsqueda a los desesperados padres del niño-adolecente Jesús, pues en aquellos tiempos la forma de alumbrar las calles era esa a través de velas, candiles y lámparas de aceite; con el tiempo la iglesia y la modernización llevaron a romantizar la historia de que este rito al mismo tiempo, en otro plano como manifestación energética para ayudar a iluminar el camino de todos aquellos padres que se encuentran en la búsqueda incansable de alguno de sus hijos o bien para ayudar a cualquier niño a encontrar el camino de vuelta a los brazos de sus padres y el regazo de su hogar,  por lo que desde hace años cientos y cientos de niños en punto de las 7 de la noche cada 7 de diciembre encienden velas, que colocan en las calles de la cuidad y en carritos de cartón que van jalando y guiando al niño perdido con su luz.

Mizu Multiservicios

Esta tradición reclamada orgullosamente por los tuxpeños se ha expandido gradual, acelerada y principalmente por los municipios de la zona norte del estado de Veracruz, así como a todos los rincones del país a donde haya emigrado un Tuxpeño de corazón, transmitiendo así la misión de “Tuxpan iluminando al mundo”.

Tan importante ha sido la preservación de esta que, en Tuxpan un callejón lleva por nombre “el callejón del niño perdido” que es la intersección de 3 calles en el centro de la ciudad, Alatriste, Médico Militar y Boulevard Reyes Heróles; coincidentemente la simbología del 3 hace alusión al movimiento continuo, la perfección como a la santísima trinidad; justo en el centro de este icónico lugar se encuentra una monumento representando el pilar de la tradición: 3 niños encendiendo una velita para que desde el corazón de este paraje ilumine su luz al resto del mundo.

Aunado a toda esta simbología del callejón del niño perdido, actualmente se ha ataviado muy atinadamente un colorido mural a las espaldas del monumento, de la autoría del artista plástico y muralista Amado Flores Procopio, quien incorpora meticulosamente cada uno de los elementos que engloba este ritual, contando así la misma historia de Tuxpan, su gente y sus tradiciones. Además también es posible apreciar los momentos y raíces de esta costumbre a través de los murales cerámicos que se revelan y cobran vida a medida que posicionas la vista en los peldaños de las 2 escalinatas de dicho recinto.

Y pues así mis estimados, finos y distinguidos lectores, es a grandes rasgos el origen y la historia de la tradición del niño, no tan niño perdido… Pero si quieren saber todavía más me avisan, porque hay muchísima información al respecto que, mientras me aventaba el show de leerla para poderles platicar todo esto, encontré un buen de discrepancias entre una fuente y otra, bueno hasta había 200 años de diferencia entre un evento y otro en cuanto al apostolado de don Fray Junípero y sus actos en los que heredó a estas tierras sus conocimientos; me tuve que armar con peritas y manzanas la línea del tiempo para encontrarle sus piecitos y sus manitas a la historia, ¡ah! lo de los carritos es meramente para incentivar la participación de la infancia a modo de arraigar en los cerebros más nuevos y maleables esta bonita estrategia de evangelización, porque acuérdense que perro viejo no aprende truco nuevo, y según un estudio de una universidad muy prestigiosa del viejo continente afirma que nunca en esta vida vamos a ser más inteligentes, que cuando fuimos niños pues nuestros cerebros en esa etapa son una tremenda esponja.

Pd. Acuérdense que en esta sección los medio maltrato, pero en caso de requerir la información en formato más serio, mesurado, formal, circunspecto, reflexivo, sensato y tipo libro de texto ya solo para copiar y pegar, ese se los dejo en otra sección.

Atte
Lic. Mormo