¡Eres muy buen Anfitrión Juan!
En la mitología griega, Anfitrión era el marido de Alcmena, madre de Hércules.
Mientras Anfitrión estaba en la guerra de Tebas, Zeus tomó su forma (se convirtió en Anfitrión) para acostarse con Alcmena, y Hermes tomó la forma de su esclavo y doble para montar guardia en el portón.
Con el embarazo de Alcmena, un alboroto fue creado, porque evidentemente Anfitrión dudó de la fidelidad de su esposa.
Al final todo fue aclarado por Zeus y Anfitrión se puso contento por ser el marido de una mujer elegida por un Dios. De aquella noche de amor nació el semidiós Hércules.
A partir de allí, el término anfitrión pasó a tener el sentido de: «aquel que recibe en su casa«. Por lo tanto, Anfitrión es sinónimo de ¡CORNUDO, TRANQUILO Y FELIZ!