Tuxpan, Ver.- El Profesor José Manuel Pozos Castro no está atendiendo los aspectos más básicos que mantienen orden en el municipio. De hecho no le interesa, lo único que quería era tener una palomita en su lista de ambiciones políticas y ser presidente de este magnífico municipio, presidente de papel porque su discurso es muy diferente a la realidad. Promete una cosa y hace lo diametralmente opuesto. 

Apenas el 5 de julio le prometió uniformes de calidad, seguro de vida, prestamos y prestaciones a los policías municipales durante una reunión cordial y de compromisos en la comandancia de la Policía, no sea que se fueran a manifestar de nuevo, ¿verdad? Pocos días después se vio la realidad. Pozos traicionó a su legión y hoy ya se le hizo bolas el engrudo. 

Supuestamente los policías fueron trasladados a la academia de El Lencero para realizar  los exámenes de confianza, sin embargo hoy los policías a través de llamadas telefónicas a sus familiares alertaron sobre el estado de abandono en el que se encuentran. 

Aparte, tanto al Secretario Guillermo Alan Vázquez Gutiérrez como al director de la Policía Municipal Raymundo Torres Cruz, no les importa la salud de sus elementos, hoy ya hubo quejas de familiares que revelan que 40 empleados de la corporación de seguridad tienen COVID allá donde los mandaron, al menos 4 de ellos tienen grave el padecimiento, y hasta el momento no ha habido un comunicado oficial que le dé certeza a sus familiares sobre como estan de salud estos uniformados. 

Fueron 167 elementos los que en medio de un operativo de la Policía Estatal y de la Fuerza Civil fueron trasladados a dicha academia, pero ahora NADIE SE QUIERE HACER RESPONSABLE Y NO LES BRINDAN LA ATENCIÓN MÉDICA QUE REQUIEREN. 

Los argumentos de los familiares que pudimos entrevistar hoy incluyen que se han negado a recibirlos. Han tocado las puertas de la comandancia de la policía para pedir el apoyo o para que les den razón, sin que el director, que es el jefe inmediato de los elementos policíacos los reciba.

Está actitud demuestra la hipocresía con la que actuó el Profesor Pozos Castro en este caso…