Una Jardineña se acerca a una tienda de mascotas del centro en busca de una mascota ‘exótica’…
Allí se encuentra con una caja llena de sapos y ranas.
El cartel dice:
SAPOS DE SEXO a sólo 200 pesos cada uno… Viene con las instrucciones.
La Jardineña, excitada, mira alrededor por si alguien estuviera escuchando, y le dice “bajito” al dependiente:
– ¡Quiero uno! …
El hombre le envuelve uno y le dice que sólo tendrá que seguir las instrucciones.
La mujer le paga y sale disparada a casa. Ya en su casa, abre la caja, lee las instrucciones muy cuidadosamente y las sigue al pie de la letra:
- Tome un baño con agua caliente.
- Use un perfume exquisito.
- Póngase un Baby Doll muy, pero MUY SEXY.
- Métase en la cama y deje que el sapo actúe como se le entrenó.
Se mete en la cama con el sapo y… ¡NADA! ¡No ocurre nada! Relee las instrucciones y en último párrafo ve el siguiente aviso:
Si tuviese algún problema o pregunta no dude de llamar a la tienda.
Así que, llama, y el de la tienda le asegura: “Bueno, voy para Jardines… estoy ahí como en media hora»…
A los diez minutos ya estaba llamando a la puerta. La Jardineña lo recibe y le muestra todo el procedimiento…
-¿Ve? ¡He seguido las instrucciones al pié de la letra y el maldito sapo se queda ahí sentado!…
El hombre, muy contrariado, agarra al sapo y mirándole a los ojos le dice muy encabronado:
¡¡ESCÚCHAME BIEN!!
¡¡¡ESTA ES LA ÚLTIMA VEZ QUE TE VOY A ENSEÑAR COMO SE HACE!!!
