Héroes de CFE al rescate: “Niño” y su último gran escape

Tuxpan, Veracruz | En la esquina de la calle Pavón y la 18 de Marzo, en la colonia Los Artistas, el sol pegaba fuerte sobre el concreto agrietado. Los vecinos miraban hacia arriba, con la mano en la frente para taparse el resplandor. Ahí, a unos metros sobre sus cabezas, un gato anaranjado estaba atrapado en la base de una conexión de media tensión. Lo llamaban “Niño”, aunque en ese momento no tenía nada de inocente.

Había sido una pelea por amor. Al menos, eso decía su dueña. “Niño” y otro gato se habían batido por una hembra que todavía no elegía rey. El perdedor cayó al suelo y se fue lamiendo las heridas, pero el ganador quedó atorado en la gloria de su huida. Ahí estaba, con los bigotes temblando y la cola erizada, sin poder avanzar ni retroceder.

Los bomberos llegaron primero. Se bajaron del camión, observaron el panorama y negaron con la cabeza. No podían hacer nada; era demasiado peligroso. Pero después aparecieron los hombres de la Comisión Federal de Electricidad. Gente acostumbrada a lidiar con líneas de media tensión y situaciones que ponen la piel de gallina. Uno de ellos se subió a la canasta y ascendió despacio, mientras “Niño” lo miraba con ojos de sospecha. Cuando estuvieron cara a cara, el felino soltó un gruñido bajo, pero ya no tenía escapatoria.

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El operador lo bajó con cuidado y se lo entregó a su compañero. Todos pensaban que la historia había terminado, que la dueña lo tomaría en sus brazos y lo llevaría a casa, quizá con una buena ración de croquetas y una caricia detrás de las orejas. Pero no. En el último segundo, cuando ya casi sentía el contacto de unas manos humanas, “Niño” hizo lo que mejor sabía hacer: escapó.

Saltó de los brazos del rescatista, se impulsó con las patas traseras y desapareció entre unos arbustos que colgaban de un terreno baldío. La multitud quedó en silencio. Unos se rieron, otros se llevaron las manos a la cabeza. La dueña suspiró. El trabajador de CFE se sacudió el uniforme.

“Así son los gatos”, dijo alguien entre la multitud.

Y con eso, todo volvió a la normalidad.

Centro Escolar Albatros A.C.