Ni entre ellos se respetan: choque entre dos taxistas en Tuxpan deja solo daños materiales
Tuxpan, Veracruz | Comenzaba el domingo, apenas había transcurrido media hora cuando el aire denso de la colonia Anáhuac fue testigo de un encuentro entre dos taxistas que parecían haber olvidado que la ciudad tiene sus propias reglas, aun para quienes la recorren a diario. La avenida Américas y la esquina 18 de Marzo se convirtieron en un pequeño campo de batalla donde los destellos rojo y blanco de dos taxis, como boxeadores viejos, se cruzaron sin medir el golpe.
Uno de ellos, un Chevrolet Aveo de 2013 conducido por Teodora «N», sin placas y con el número económico 924, se lanzó hacia el cruce con la audacia de quien piensa que el mundo entero le pertenece. Pero esta vez, la calle no se hizo a un lado. Al contrario, se le enfrentó en la figura de un Nissan Sentra, también blanco y rojo, marcado con el número 1682 y guiado por un joven de 23 años, Alfredo Antonio «P», vecino de la misma colonia. Dos vidas cruzadas por la imprudencia y un poco de esa suerte rara que a veces protege a los que viven al filo del riesgo.
El impacto fue seco, pero no fatal. Una sacudida que podría haber terminado mal, pero que hoy solo dejó huellas en la pintura y en el ego de los conductores. Ninguno salió herido, aunque ambos sintieron ese frío en la columna que da saber que la muerte estuvo cerca pero decidió detenerse.
Los oficiales de Tránsito llegaron a la escena. Tomaron nota, intercambiaron miradas y parecieron saber, sin necesidad de palabras, que este choque era solo otro eslabón en la cadena interminable de percances que la ciudad les arroja todos los días. Hoy, los conductores se fueron con el orgullo magullado y el recordatorio de que, en Tuxpan, ni siquiera entre ellos se respetan.