Postura de Pepe Mancha ante coaliciones
Para el 2021 el PAN podrá ir en coalición flexible o parcial y con programa democrático con otras fuerzas políticas a excepción de Morena.
Como Consejero Nacional y panista desde hace 24 años, sé que el año próximo estará en juego más que una elección, más que la imagen de un partido o de un candidato, inclusive, más que una ideología; lo que está en juego, es el futuro de nuestro país.
𝗧𝗲 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗮𝗿𝘁𝗼 𝗺𝗶 postura 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗹𝗮 𝗱𝗲𝗰𝗶𝘀𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝗺𝗶 𝘃𝗼𝘁𝗼:
En estos últimos días he reflexionado sobre mi postura respecto de ir en alianza con otros partidos, particularmente con el PRI; sin duda, es una decisión difícil para cualquier panista, sobre todo, cuando el partido con el que nos queremos aliar ha sido nuestro adversario desde el momento mismo de nuestra fundación; pues Acción Nacional nació precisamente para combatir los excesos del mismo.
Sin duda, he estado atento a los diversos comentarios y posiciones que se han expuesto en los último días en las diversas plataformas y medios de comunicación, tanto del PAN, empresarios, analistas políticos, líderes de opinión, y sobre todo de como de la sociedad civil.
Me he guardado hasta el final mi postura para no influir ya sea a favor o en contra en ninguno de mis amigos y compañeros cercanos y así poder sesgar su decisión.
Sin embargo, es este órgano el Consejo Nacional, el órgano deliberativo que tiene la alta responsabilidad de tomar esta decisión, y es ésta la fecha en que se debe discutir para llegar a una determinación. Por ello, hoy quiero hacer uso de la voz para posicionarme al respecto.
Estoy a favor de la alianza con el PRD y con otros partidos, con excepción de Morena, inclusive con el PRI. Soy panista, desde mi adolescencia, desde hace 24 años, soy de familia panista con militancia de casi 40 años en Acción Nacional, desde que ingresé al partido he trabajado de manera constante e ininterrumpida en todas las campañas que ha librado Acción Nacional en mi municipio y en mi Estado, y por supuesto, conozco la historia y la doctrina de nuestro querido partido, conozco también la historia contemporánea de nuestro México, de nuestro amado país que es la casa de todos nosotros los mexicanos.
Quiero decirles, que en el año 2016 tuve el honor de ser el dirigente del Comité Directivo Estatal del PAN en Veracruz, un Estado que nunca había ganado el PAN ni la oposición, ya que siempre nos faltaba un mínimo porcentaje de votos para poder obtener el triunfo.
Es por ello, que concebimos la idea de generar una alianza con el PRD, un partido que en muchos temas es ideológicamente opuesto al partido Acción Nacional, como en los casos de aborto, los matrimonios con personas del mismo género y otros.
Recuerdo bien, que esos temas hacían casi imposible concebir dicha alianza, sin embargo, la situación política, económica y social que privaba en ese momento en Veracruz era realmente catastrófica. Es por ello, que decidimos dar ese paso hacia adelante y acordar un convenio de coalición con el PRD, con una definición clara y firme respecto a las posturas ideológicas de cada partido, ¿y cuáles fueron? Pues que en las cuestiones ideológicas en donde éramos claramente contrarios en nuestras posturas, se encorchetaron y durante el periodo de gobierno que abarcara la coalición, se quedarían dichos temas tal como se encontraran en ese momento y no se iba a modificar de ninguna manera tanto en las leyes como en las políticas públicas.
El resultado de esta coalición fue que el Partido Acción Nacional pudo ganar por primera vez el Estado de Veracruz, cosa que no se había logrado nunca. Cabe aclarar, que sin los votos del PRD no hubiéramos podido alcanzar dicho triunfo, por lo que podemos afirmar que esa alianza estratégica fue electoralmente rentable y eficaz.
Ahora bien, en este momento la alianza más controvertida que vamos a discutir, por supuesto que es la alianza con el PRI que como ya lo dije, ha sido nuestro adversario en toda la historia de nuestro partido.
¿Entonces… por qué estoy a favor?
Porque doctrinaria e históricamente es correcto ir a favor de esta alianza, porque como lo decían nuestros fundadores allá en 1939 “Aquí nadie viene a triunfar ni a obtener, solo un objetivo ha de guiarnos, acertar lo que sea mejor para México”.
Y yo creo señoras y señores consejeros que en el 2021 está en juego más que una elección, más que la imagen de un partido o de un candidato, inclusive, más que una ideología; lo que está en juego, es el futuro de nuestro país.
Si observamos, desde el momento mismo de la toma de protesta del actual presidente Andrés López Obrador, claramente advierte al pueblo de México, que ese acto, el de su toma de protesta, representaba no un simple cambio de gobierno, sino que afirmó que lo que representaba era un cambio de régimen, y en efecto, lo que hemos visto a partir de ese día, es precisamente el inicio del desmantelamiento de las instituciones, el abuso del poder, el manejo discrecional de los recursos públicos, la ignorancia y la violación constante de la ley, la persecución de los adversarios políticos a través de los órganos del Estado, el control de los medios de comunicación, el apoderamiento del poder legislativo y judicial por parte del poder ejecutivo, un régimen que busca el enfrentamiento y la división entre los mexicanos, el retroceso a las prácticas que creíamos ya erradicadas y que todas ellas juntas aplicadas sistemáticamente por este mal gobierno de la 4T, llevarán a la ruina y a la miseria a nuestro país y nuestros habitantes.
Y ustedes dirán… ¿Qué acaso el PRI no es el creador de esas prácticas y de esas formas de gobernar? Y yo les digo… sí.
Sin embargo, también le digo que el PRI de hoy no es el mismo de hace 80 años, ni tampoco México es el mismo que el México del siglo pasado, durante nuestro periodo como oposición del PRI logramos combatir, contener, modificar, moldear, pero sobre todo, mejorar las instituciones creadas por los gobiernos priistas.
Sí, hay que decirlo, creadas por los priistas, porque no había de otra, porque ellos eran el gobierno y nosotros la oposición. Sí, instituciones que se fueron volviendo corruptas, ineficaces e ineficientes, anti democráticas, opacas, pero allí estuvo el PAN desde la oposición luchando por cambiarlas, luchando por mejorarlas, luchando por transparentarlas, luchando por eficientarlas, luchando por democratizarlas, pero sobre todo… luchando para ponerlas al servicio de los mexicanos.
¡Esto es precisamente la victoria cultural del PAN!
¡Estos logros mis amigos, representan el esfuerzo y el sacrificio de nuestros fundadores y de muchos panistas que nos precedieron y que entregaron su vida por lograr el México que hoy tenemos!
¡Esto es lo que hoy está en riesgo!
¡Esto es lo que quiere destruir este nuevo régimen! ¡Esto es lo que hay que defender!
No nos engañemos, estamos ante una dictadura en ciernes, quien no lo quiera ver así, se está equivocando, tenemos un presidente que desde su campaña tal parece que está siguiendo el guion de la dictadura chavista de Venezuela, allí están las acciones populistas de vender el avión presidencial, de salirse del palacio nacional, su discurso de confrontación de pobres contra ricos, de su odio contra los empresarios, de su hipócrita humildad, su intento de control de los medios de comunicación, su estrategia electorera de revocación de mandato, la expresión de querer desaparecer el indicador de PIB, y el “yo ya no me pertenezco”, representa claramente el guion que está siguiendo el presidente y cuya final es la dictadura.
Una dictadura como la de Venezuela cuyo inicio es la división entre sus ciudadanos, incluso entre familias, el ataque frontal a los empresarios que generan empleos y que tristemente termina en la destrucción total de la economía y en la pobreza total de sus habitantes, en la expropiación de la propiedad privada y la desaparición de la democracia.
Hoy vemos cómo los ciudadanos de Venezuela salen a los basureros a conseguir comida, más aún, vemos el éxodo de venezolanos hacia otros países huyendo de la represión, de la pobreza y de la falta de oportunidades.
Esto, panistas… ¡Es contrario a los principios de doctrina de nuestro partido, es contrario a la dignidad de la persona y al bien común! Es contrario a nuestra concepción de Nación, Persona, Estado, Orden, Libertad, Enseñanza, Trabajo, Iniciativa, Propiedad, Campo, Economía, Municipio, Derecho y Política; Principios aprobados por la Asamblea Constituyente en sus sesiones del 14 y 15 de Septiembre de 1939.
Y muchos podrán decir, esto no va a ocurrir en México como pensaron los venezolanos cuando dijeron “lo que está pasando en Cuba nunca nos va a suceder a los venezolanos”. No amigos, no nos equivoquemos, porque después no nos podremos arrepentir.
Porque cuando se instaura una dictadura, no hay marcha atrás. Porque cuando queramos ponernos de acuerdo bajo una dictadura ya establecida, cualquier esfuerzo resulta vano e inútil, pues la dictadura ya tiene al ejército y amenazando a sus ciudadanos, por eso, todas las prebendas que hoy el presidente le está otorgando a los militares.
Porque cuando hay una dictadura, ya no habrá instituciones, ya no habrá democracia o una imagen que cuidar o un partido que defender. Por ello, los panistas tenemos el deber de atajar esta posibilidad, tenemos la responsabilidad de impedir que Morena alcance la mayoría calificada para reformar la Constitución y poder así perpetuarse en el poder, aún si este esfuerzo implica aliarse con nuestros viejos adversarios.