CONCANACO pide al gobierno se habilite el ducto Texas-Tuxpan
CONCANACO (Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo) ha pedido al gobierno federal se lleven por separado los casos con con las empresas IEnova y TransCanadá.
Que por un lado se manejen los asuntos de conflictos legales y por otro se le de marcha forzada a la importación del gas natural.
Con ese objetivo, se pretende establecer antes de que termine Julio “una ruta crítica”, con fechas específicas, para llevar a cabo estas dos acciones.
José Manuel López Campos, presidente de la CONCANACO, comentó que es importante por el gran volúmen de gas natural que importaría México desde Estados Unidos, con el consecuente aumento de la competitividad en la industria, los servicios y la mayor atracción de inversiones productivas.
El estimado es que con el gasoducto Texas-Tuxpan se dé un incremento de 40% en la capacidad de importación del gas natural, además de que tendremos un combustible más limpio y eficiente para generar mejor energía eléctrica y con esto desarrollar mejor la industria.
La construcción del gasoducto Sur de Texas requirió una inversión de más de 2,500 millones de dólares, y a pesar de que este ya concluyó desde el mes de Junio no ha sido iniciada su operación porque hay un desacuerdo entre el gobierno federal y las empresas sobre las cláusulas relacionadas con el contrato de concesión.
Por ejemplo, esas cláusulas determinan la responsabilidad de las pérdidas en casos de que el suministro de gas natural no pueda llevarse a cabo por las afectaciones de un huracán. En términos generales, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) quiere quitar esas cláusulas para deslindar recursos públicos, mientras que las empresas privadas se oponen a ello.
Al mismo tiempo, el gobierno mexicano cuestiona que al final del contrato, el ducto será propiedad de la empresa y no de la CFE. La capacidad de transportación de gas que no emplea la CFE es aprovechada por las empresas, aunque ésta haya financiado el total de la obra, y terminados los 25 años del contrato, si la CFE quiere emplear los ductos, tendrá que rentarlos (el tubo tiene una vida útil de 40 años, que son 15 años más de lo que durará el contrato).
Esta semana se realizará otra reunión entre funcionarios del gobierno federal y de la CFE, directivos de IEnova y TransCanada y un representante del CCE.
El gasoducto, llamado Sur de Texas, o Texas-Tuxpan comienza en alta mar en el Océano Atlántico en su cuenca del Golfo de México, en la frontera cerca de Brownsville, Texas, con desembarcos en Altamira Tamaulipas, y Tuxpan Veracruz, que se conectarán con los oleoductos de Tamazunchale y Tula y otras instalaciones de terceros. Su distancia es de 775 kilómetros, con un diámetro de 42 pulgadas.