¿Saben la diferencia que existe entre «tú» y «usted»?.
Este es un buen ejemplo que les ilustrará muy bien esta diferencia.
El director general de un banco se preocupaba por un joven director estrella que después de un periodo de trabajar junto a él, sin parar nunca, ni para almorzar, empieza a ausentarse al medio día. Entonces el director general del banco llama al detective privado del banco y le dice:
Siga al Sr. Silva una semana entera, no vaya a ser que ande en algo malo o sucio…
El detective cumple con el cometido, vuelve e informa:
SILVA sale normalmente al medio día, toma su coche, va a su casa a almorzar, luego le hace el amor a su mujer, se fuma uno de sus excelentes habanos y vuelve a trabajar.
Responde el director:
¡Ah, bueno!, menos mal, ¡no hay nada malo en todo eso!
Luego el detective pregunta:
¿Puedo tutearlo, señor?
Sorprendido, el director responde:
¡Si, cómo no!…
Y, entonces, el detective le dice:
Te repito: SILVA sale normalmente al medio día, toma TÚ coche, va a TÚ casa a almorzar, luego le hace el amor a TÚ mujer, se fuma uno de TUS excelentes habanos y vuelve a trabajar…