Sociedad de Padres de Familia. El Fraude Perfecto
En todas las escuelas públicas de Tuxpan y supongo que del estado… y de la república existen estas asociaciones de padres de familia patito que le exigen a los papás que paguen, o de lo contrario el niño no podrá entrar a la escuela; esto con la complicidad de los directores.
Los argumentos.
El argumento principal para cobrar algo ilegal, es que el estado no manda suficientes fondos a las escuelas, a pesar de que en este 2016, la SEP tuvo 302,986 millones de pesos. Algunos otros argumentos son las mejoras a los planteles, compra de papelería para la dirección, etc.
¿Cómo operan las SPF Patito?
Las SPF Patito operan de forma muy simple y bajo el beneplácito del estado. Al menos en el estado de Veracruz, el gobierno hasta tiene un programa para controlarlas que se llama APAFEV, que sirve para llevar un control de los gastos que hace la SPF en cada escuela.. En una junta de padres, alguien propone a un conocido para que sea el “presidente”, al “vicepresidente, al “tesorero”, al “vocal” (que es una por grupo), y entonces comienzan a operar. El tesorero abre una cuenta bancaria para recibir el pago de la “inscripción”. Ya con el recibo del banco, el personal de la escuela con mucho gusto inscribe a tu hijo.
Aunque el artículo tercero de la constitución política de la república mexicana rece: “Todo individuo tiene derecho a recibir educación. El estado -federación, estados y municipios- impartirá educación preescolar, primaria y secundaria”, el estado se encarga por un lado, de administrar los “donativos” obligatorios de los padres y por el otro, negar ante la sociedad e incluso castigar a los directores si se denuncia un caso en la SEV.
¿Y… dónde está el fraude?
Aclaración: Los padres de familia de las asociaciones no tienen la culpa de esto. Sólo son manipulados por el estado, para obtener un bien común para la comunidad escolar. De hecho ni siquiera han de estar conscientes del fraude.
Para comenzar, ninguna es una “ASOCIACIÓN”. Para que fuera una Sociedad de Padres, debería ponerse ante notario, y tener una cuenta a nombre de la sociedad. Por ejemplo: “Asociación de Padres de Familia de la Primaria Enrique C. Rébsamen, AC”. Con esto se le da el carácter de legalidad.
¿Por qué el estado tiene un programa de cómputo para el control de los gastos de las APF? Con simples conocimientos de contabilidad se vislumbra el fraude. Las APF cuando compran bienes para la escuela, sacan las facturas a nombre… de la SEV. Si el dinero con el que se compran los bienes, ya sea papeleria, computadoras, reparaciones eléctricas, plomería, albañilería, etc que es de la APF, ¿Por qué sacan las facturas a nombre de la SEV?
A ver, si (hipotéticamente) le pido a todo mi personal que cuando cargue gasolina en su auto, saque una factura a mi nombre… ¿para que? Obvio, para demostrar un gasto más ante el SAT. De esta forma, al SAT le digo que gasté ese dinero en gasolina, y pago menos IVA.
En una organización gubernamental, la contabilidad es un proceso esencial. Entonces ¿Quién paga? Los padres de Familia. ¿A que nombre sale la factura de lo que se paga? de la SEV. ¿De dónde saca el dinero la SEV para pagar esa factura y que cuadre su contabilidad? De su cuenta bancaria. ¿Quién se queda con ese dinero? ¡Ahhhhh! Eso no lo sabemos. Ni cómo se reparte.
Por eso cuando escucho o veo, o leo a un Padre de Familia “defendiendo” a las APF, con el argumento de que el estado no manda los recursos suficientes… me da risa.
Las ventajas de tener una Sociedad de Padres de Familia Constituida legalmente son muchas. Por ejemplo, pueden recibir donativos de la iniciativa privada. Es decir, pueden ir y solicitar a una EMPRESA una lana para hacer espacios deportivos o aulas. Cómo la A.C. está facultada para FACTURAR el donativo, a la EMPRESA le puede parecer interesante, primero porque ese dinero que dona es deducible de impuestos, y segundo, porque puede hacer publicidad sobre el tema.
Es obvio que al gobierno estatal no le conviene que se regulen las APF. Por lo pronto, si te obligan a pagar por la inscripción de tu hijo, denuncia al propietario de la cuenta ante el SAT y exige que te den una factura de ese dinero que donaste.