10 puntos para ser feliz

¡Todos buscan la felicidad! Absolutamente todos. No conozco una sola persona que no la busque.

¿La felicidad es el placer?

Judge Lawrence Grey escribió un libro titulado “The Jelly Donut Diet” (La dieta de la dona de jalea)… Filosofía gringa para encontrar la felicidad. La dieta de la dona de jalea funciona porque nos proporciona ese necesario elemento para gozar de “una buena vida”: SATISFACCIÓN ¿Frustrado por los éxitos de alguien más, te retuerces de envidia? Cómete una dona de jalea. ¿Tu trabajo apesta? Cómete una dona de jalea. ¿Tu novia/o – esposo/a no aprecia todo lo que haces? Cómete una dona de jalea. ¿Tus hijos (si es que tienes) te odian? Cómete una dona de jalea. ¿Tu suegra es un dolor de estomago? ¡Cómete una dona de jalea y dale una a ella!

Ninguno de los problemas que tengas afectarán el sabor de una deliciosa dona de jalea. Nada debe interferir para que tu disfrutes esa pequeña cosa que te da tanto placer. Así que si vas a algún restaurante cerrado en California y quieres incomodar a los gringos, enciende un cigarro y fúmalo con una mano y cómete una dona de jalea con la otra. Si algún gringo se queja, explícales que estás bajo un tratamiento: ¡THE JELLY DONUT DIET!

Eso funciona muy bien en el Gabacho. Pero en el resto del mundo, el camino para llegar a la felicidad es mucho más complicado. Sin embargo Alejandro Jodorowsky tiene diez consejos para ser feliz.

1. Cuando dudes de actuar, siempre entre «hacer» y «no hacer» escoge hacer. Si te equivocas tendrás al menos la experiencia.
2. Escucha más a tu intuición que a tu razón. Las palabras forjan la realidad pero no la son.
3. Realiza algún sueño infantil. Por ejemplo: si querías jugar y te hicieron adulto antes de tiempo, ahorra unos 500 euros y ve a jugarlos a un casino hasta que los pierdas. Si ganas, sigue jugando. Si sigues ganando, aunque sean millones, sigue hasta que los pierdas. No se trata de ganar sino de jugar sin finalidad.
4. No hay alivio más grande que comenzar a ser lo que se es. Desde la infancia nos endilgan destinos ajenos. No estamos en el mundo para realizar los sueños de nuestros padres, sino los propios. Si eres cantante y no abogado como tu padre, abandona la carrera de leyes y graba tu disco.
5. Hoy mismo deja de criticar tu cuerpo. Acéptalo tal cual es sin preocuparte de la mirada ajena. No te aman porque eres bella. Eres bella porque te aman.
6. Una vez por semana, enseña gratis a los otros lo poco o mucho que sabes. Lo que les das, te lo das. Lo que no les das, te lo quitas.
7. Busca todos los días en el diario una noticia positiva. Es difícil encontrarla. Pero, en medio de los acontecimientos nefastos, siempre, de manera casi imperceptible, hay una. Que se descubrió una nueva raza de pájaros; que los cometas transportan vida; que un nene cayó desde un quinto piso sin dañarse; que la hija de un presidente intentó suicidarse en el océano y fue salvada por un obrero del cual se enamoró y se casaron; que los jóvenes poetas chilenos bombardearon con 300.000 poemas, desde un helicóptero a La Moneda, donde fue eliminado allende, etc.
8. Si tus padres abusaron de ti cuando pequeño/a, confrontate calmadamente con ellos, en un lugar neutro que no sea su territorio, desarrollando cuatro aspectos: “Esto es lo que me hicieron. Esto es lo que yo sentí. Esto es lo que por causa de aquello ahora sufro. Y esta es la reparación que pido”. El perdón sin reparación no sirve.
9. Aunque tengas una familia numerosa, otórgate un territorio personal donde nadie pueda entrar sin tu permiso.
10. Cesa de definirte: concédete todas las posibilidades de ser, cambia de caminos cuantas veces te sea necesario.

Todos los pasos que nos recomienda Jodorowsky pueden resultarnos útiles pero uno debe ser cuidadoso porque es fácil confundir la felicidad con el bienestar. Por eso muchas personas tienden a confundir el sentido de los bienes materiales en sus vidas, creyendo que les darán una felicidad que nunca encontrarán.

Y es que las cosas materiales nos dan bienestar, es más cómodo viajar en un coche que en transporte público, es agradable portar un abrigo cuando hace frío, es necesario tener algo qué comer. Como una dona de jalea o un “dedo de novia”. Pero ese bienestar no tiene nada que ver con la felicidad.

La felicidad es un concepto mucho más profundo de estabilidad, seguridad y esperanza.

La felicidad no es la falta de problemas o la ausencia de dificultades. ¿Se puede ser feliz en medio de una tormenta? Sí, porque la felicidad no es algo que esté necesariamente fuera de nosotros y el primer lugar donde debemos encontrarla es en nuestro interior.